En medio de escenas de dolor, anoche llegaron al corregimiento de San Cayetano, municipio de San Juan Nepomuceno, Bolívar, los cadáveres de los hermanos ganaderos Dayro y Wilmer Rivera Rodríguez, secuestrados y asesinados el 14 de marzo del 2019 en su propia finca.
Fueron 11 meses los que transcurrieron y en ese tiempo la incertidumbre, el dolor y la angustia se apoderaron de los miembros de esta familia muy reconocida en la región de los Montes de María, ante la demora de Medicina Legal en Barranquilla de entregar los cadáveres.
El periodista Luis De Ávila, quien ha seguido muy de cerca esta tragedia, le dijo a Mundo Noticias que el proceso de entrega de los cuerpos sin vida se dio tras culminar las investigaciones de rigor y determinar las causas reales de sus muertes.
Los hechos que conmocionaron al departamento de Bolívar, se registraron en la Finca Playita en San Cayetano, cuando varios hombres fuertemente armados secuestraron a los hermanos Dayro y Wilmer Rivera Rodríguez, y por quienes por su liberación exigían una millonaria suma de dinero.
Pese a que los habían asesinado, sus captores mantenían sus exigencias económicas.
Una información llegó a las autoridades en el sentido de que los dos ganaderos habían sido asesinados desde el mismo día de su plagio.
Los cuerpos sin vida fueron hallados enterrados en una fosa común dos meses después de ocurridos los trágicos hechos.
Dentro de las investigaciones de las autoridades se encuentran detenidas cuatro personas, entre ellas la señora Nelly Luz Yepes Posso, esposa de una de las víctimas.
La sepelio de los dos hermanos se producirá hoy martes en el cementerio de San Cayetano, corregimiento que está conmocionado por estos hechos nunca visto en la región de los Montes de María.
