412 familias de San Pablo tendrán casas nuevas, anunció el gobernador Arana

La espera terminó para 412 familias del municipio de San Pablo. En su visita al sur del departamento, el gobernador de Bolívar, Yamil Arana, hizo el anuncio que cambiará sus vidas: tras años de gestiones, contratiempos y promesas incumplidas, la Gobernación destinará 20 mil millones de pesos para concluir el proyecto de vivienda Urbanización Enraizar III y entregar las casas que tantas familias han esperado durante más de una década.

“Hoy, en San Pablo, reafirmamos nuestro compromiso con la gente que más lo necesita. Vamos a garantizar que cada una de estas familias reciba su vivienda digna y que este largo camino de espera llegue a su fin. Mi propósito es volver aquí para entregar las llaves de sus nuevos hogares”, expresó Arana en un emotivo encuentro con los beneficiarios.

El proyecto, que inició en 2012 para beneficiar a 624 familias en situación de desplazamiento, sufrió múltiples retrasos y obstáculos, desde problemas de financiación hasta desafíos técnicos. En 2018 se entregaron las primeras 200 viviendas, pero las restantes quedaron paralizadas. Ahora, con el respaldo del Ministerio de Vivienda y el compromiso del gobierno departamental, la urbanización será culminada.

Este anuncio representa más que una obra de infraestructura: es la materialización de un sueño colectivo que fortalecerá el arraigo y la calidad de vida de cientos de familias en el sur de Bolívar. “El sur es una tierra de gente trabajadora y resiliente. Hoy, empezamos a saldar esta deuda histórica con ustedes”, agregó el mandatario.

Datos clave:
• Inicio del proyecto: noviembre de 2012, con un plan para beneficiar a 624 familias en situación de desplazamiento.
• Infraestructura inicial: redes de agua potable, alcantarillado, energía, vías y andenes.
• Progreso hasta 2018: entrega de 200 viviendas.
• Financiación actual: 20 mil millones de pesos aportados por la Gobernación de Bolívar.
El proyecto Urbanización Enraizar III, que ahora avanza hacia su etapa final, se convierte en un símbolo del compromiso del gobierno de Bolívar Mejor con las comunidades más vulnerables y la búsqueda de soluciones concretas para transformar vidas.