Moto trabajadores le piden al Distrito reactivar sus labores en Cartagena
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Cartagena de Indias, septiembre 1 de 2020
En Cartagena, el comercio formal ha actuado con la debida diligencia frente a las condiciones impuestas por la COVID-19. Desde los inicios mismos de la pandemia, la actividad estuvo dirigida a formular e implementar protocolos que aseguraran la tranquilidad tanto de la autoridad como de los ciudadanos, frente al desarrollo de las mismas. Los mejores ejemplos de ello, fueron los planes pilotos implementados con total éxito. El compromiso es indeclinable y esperamos que muy pronto se reactive la totalidad de la economía, incluyendo restaurantes, entretenimiento y comercio a orilla de calle.
Es redundante expresar la conocida alta dependencia que tiene Cartagena del turismo, sector último en la cadena de las reactivaciones previstas. Sabemos que esta apuesta productiva abarca el 42% de la fuerza laboral, lo que la hace más vulnerable a los estragos económicos y sociales que ya están actualizados y cuya expresión más diciente es la destrucción masiva del empleo que hoy, según cifras el DANE, trimestre mayo- julio, alcanzó el 20.3, lo que significa, respecto del mismo periodo del 2019, que se haya triplicado.
La última encuesta de opinión del comercio que realizó el Gremio nos muestra que para el 86% de los empresarios las ventas fueron peores o iguales en julio respecto a junio y 2 de cada 3 comerciantes las vieron disminuir drásticamente.
El cierre de establecimientos y cancelación de matrículas es un proceso más demorado, pues impone la liquidación de las empresas y lo iremos precisando con las cifras del Registro Mercantil, pero ya conocemos el guarismo de la destrucción del empleo, lo cual es una verdadera tragedia social: más de 85.000 empleos, todo sin mencionar la informalidad y en los niveles de más bajos ingresos de la población. Un dato: un centro comercial de pequeñas áreas en sus establecimientos, ya tiene 60 que fueron entregados definitivamente. En el Centro Histórico, Bocagrande y la Avenida Pedro de Heredia, ya se han desocupado definitivamente muchos, incluyendo marcas muy reconocidas y de largos años de funcionamiento.
Desde la Administración Distrital se trabaja en un plan de reactivación económica y social de la ciudad, una de cuyas primeras tareas será la valoración del impacto de la COVID -19, de cara la definición de las líneas de recuperación del tejido social y empresarial, que tienen enormes demandas de apoyo desde todos los niveles territoriales del Estado.
“Entre tanto confiamos en que pronto puedan abrirse todos los restaurantes de la ciudad, pues hoy sólo están permitidos los que tiene espacios abiertos; lo mismo que las plazoletas de comidas de los centros comerciales y poner en marcha lo más pronto posible el que los espacios públicos susceptibles de uso para restaurantes puedan hacerlo y así contribuir desde la Administración con el resurgimiento de la vitalidad de ciudad y el salvamento del tejido empresarial que no arrasó la pandemia” indicó Fadul.