Resplandecer navideño

Por: Germán Danilo Hernández

La temporada de Navidad genera en casi todos los países del mundo una dinámica de integración familiar y social diferente a lo que ocurre durante el resto del año. Las emociones individuales y colectivas se ambientan con decorados, alumbrados, cánticos, regalos y múltiples manifestaciones acordes a costumbres y tradiciones culturales de los pueblos.

Ese espíritu navideño que gusta a muchos y le es indiferente a otros, impulsa algo más que sonrisas, reflexiones y buenos propósitos; es un factor que dinamiza las economías, genera empleos, promueve el turismo y aporta a muchos otros sectores de producción que aportan al desarrollo de ciudades y países.

Millones de personas viajan por el mundo buscando  destinos ideales para disfrutar en familia, en parejas o solos, lo que se conoce como “la mejor época del año”; los gobiernos y empresas de esos destinos se preparan entonces con grandes inversiones para recibirlos, porque con ellos también llegan oportunidades de crecimiento económico y bienestar para sus comunidades.

Son esas las razones que motivan a los gobiernos a realizar grandes inversiones, para competir por lograr los más atractivos decorados y alumbrados navideños en sus ciudades. En 2024 Nueva York ha invertido aproximadamente $US 100 millones, equivalente a 400 mil millones de pesos colombianos, para convertir  sus principales calles, plazas, edificios y espacios públicos en lugares de fantasía iluminados con millones de luces multicolores y sorprendentes adornos, con los que ratifica su condición de “destino navideño por excelencia”. Le siguen Tokio, Japón, Londres, París y Madrid, con inversiones que oscilan entre 55 y 80 millones de dólares.

Sin pretender alcanzar el nivel de esas capitales, los destinos turísticos de países en desarrollo también hacen lo propio por potenciar su proyección y generar rentabilidad social a partir de ambientes atractivos para sus ciudadanos y visitantes. Es lo que este año ha ocurrido en Cartagena con la decisión del gobierno distrital de invertir en una decoración navideña sin precedentes en la ciudad y que se concentra en 50 puntos estratégicos de Cartagena.

Para el agrado de muchos y  enfado de pocos, miles de personas disfrutan de los alumbrados, la calidad de los decorados, y las activaciones culturales en este resplandecer navideño cartagenero, que alcanzó espacios antes desaprovechados para atraer turismo, como el parque lineal de Crespo, mientras que las imágenes de la ciudad iluminada se proyectan ya en medios de comunicación nacionales e internacionales  y a través redes sociales, aportando a su posicionamiento como destino turístico.

Muchas familias locales que acostumbran a viajar en esta temporada para deslumbrarse con decorados, coinciden en afirmar que ahora es Cartagena la que motiva a ser visitada para encontrarlos, al tiempo que los  sectores hotelero, gastronómico, comercial, de transporte, entre otros, perciben que el actual resplandecer navideño ilumina un futuro prometedor en reactivación económica y de desarrollo integral de la ciudad.

Coletilla: mi actual vinculación profesional al Distrito de Cartagena no propicia el enfoque de esta columna, pero admito como eventual conflicto de interés que disfruto mucho los decorados navideños urbanos.

*Asesor de comunicación de gobierno.