DATT fija nuevo pico y placa para taxis en Cartagena
31 enero 2021
Distrito garantizó contratación de Salvavidas de Cartagena durante el 2021
31 enero 2021

El Vitara rojo…

Compártelo:

Por: Freddy Machado

Mi primer carro fue un campero. Era un Vitara rojo de dos puertas. El motor era Suzuki. No era un carro veloz, pero subiendo a Turbaco o a La Popa, se lucía y evocaba en esas pendientes, aquella antigua propaganda del Renault 4, el amigo fiel.

En ese vehículo aprendí a manejar. El curso lo realicé en el antiguo Tránsito Departamental de Bolívar. Mi instructor se llamaba José. Era un hombre canoso -como el que escribe-, pero al final del curso, estoy seguro que José ya me superaba en canas.

El instructor consideraba inaudito e inexplicable, tener un alumno tan “traste” y que se jactaba de no conocer las funciones de los cambios, no saber dónde estaba el pedal del freno y ser muy esquivo en ubicar el punto de contacto.

Un día, un desconocido que deambulaba por el vecindario, se enamoró del Vitara e hizo una buena oferta. Lo vendimos. El contrato fue verbal y como era de usanza a comienzos de siglo, el traspaso se hizo en blanco pues así lo solicitó el comprador.

Error de errores. Lo lógico es que el comprador se interese por la titularidad de su derecho como legítimo propietario.

Las innumerables multas se registran a mi nombre en el SIMIT y también estoy debiendo los impuestos, todo porque el comprador nunca ha querido asumir como propietario del Vitara Rojo.

Esta vivencia también la experimentan un número significativo de ciudadanos por exceso de confianza…. Es la historia del Vitara Rojo del que sigo siendo dueño solo para asumir las multas e impuestos, de quienes usufructúa el vehículo en estos momentos.

Los poseedores del Vitara Rojo, he podido indagar, por el lugar de las multas reportadas, están radicados en Sucre y se encuentran muy cómodos pues se mantienen imperturbables sin conocer mis afugias.

Y, siendo muchos los ciudadanos que sufren con estos trámites incompletos, es hora de pensar en una Ley que corrija estas situaciones sin que implique costo para quien solo aparece como propietario en el papel. Me han dicho que si uno se pone al día, se puede autorizar el traspaso a nombre de “desconocidos” pero como dicen los muchachos “no aguanta”.

A mi juicio, la posible ley debe autorizar la inmovilización del vehículo hasta el pago de las obligaciones por parte del verdadero propietario. Es una solución más equitativa.

La verdad es que el Vitara Rojo, a su manera, me ha hecho saber que también es un amigo fiel pues aún vendiéndolo, el buen campero nada que me abandona.

Compártelo: