Con ollas comunitarias atienden a damnificados de invierno en Cartagena

Con una inversión de $1.204.620.321.67 millones, provenientes del Gobierno Nacional, a través de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), se puso en marcha el proyecto ollas y/o comedores comunitarios que beneficiarán a cientos de familias.

En el marco del proyecto nacional de ollas comunitarias, el Plan de Emergencia Social- Pedro Romero, articulado con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), entregarán 1.200 raciones alimenticias diarias de almuerzo y 1.200 raciones alimenticias diarias de merienda en tres comunidades en condición de pobreza extrema de Cartagena a raíz de la calamidad pública de la ola invernal.

Con una inversión de $1.204.620.321,67 millones, provenientes del Gobierno Nacional, a partir del jueves 9 de febrero, niños, adolescentes y adultos que resultaron afectados por los efectos devastadores del fenómeno de la Niña de Villa Gloria y Mar Linda, ubicadas en el corregimiento de La Boquilla, y en Reino de Pambelé, en Bayunca, recibirán comida servida gracias al proyecto ollas y/o comedores comunitarios.

Los beneficiados recibirán dos comidas al día, cinco veces a la semana durante tres meses. Estos alimentos serán preparados por mujeres lideresas de las comunidades favorecidas, quienes fueron contratadas y capacitadas en higiene y manipulación de alimentos y comunicación para el ejercicio de su labor.

“El objetivo de la actividad es brindarles a las operarias los conocimientos básicos en salud, nutrición, comunicación, respeto, tolerancia, las buenas prácticas de manufactura y todo lo relacionado con el saneamiento básico ambiental, herramientas necesarias para el funcionamiento del programa. En la parte de nutrición es importante que tengan el conocimiento de los alimentos para que puedan divulgar con los usuarios la razón por la que se han incluido ciertos alimentos dentro del menú”, aseguró Samira Álvarez Cueto, nutricionista de la Fundación Salud y Nutrición FUNDASALUD, contratista del PES-Pedro Romero.

Una de las lideresas y operaria de la olla de Reino de Pambelé es Isabel Castillo Teherán, quien hace parte de los COMBAS y estuvo al frente como voluntaria en la emergencia invernal.

“Hice el curso de manipulación de alimentos, cocina y soy trabajadora social, por eso estoy aquí aportando un granito de arena en esta oportunidad que Dios nos ha puesto para nuestra comunidad. La expectativa es que es todos estarán agradecidos con este proyecto que está iniciando y sabemos que se vienen cosas buenas de ahora en adelante”, sostuvo.

Para Berlides Payares, cocinera de la olla de Bayunca, estar en este proceso es una bendición, ya que podrá seguir sirviendo en su comunidad. “Desde que iniciaron las ollas comunitarias para las personas que se habían inundado, yo estuve colaborando para repartir alimentos. Hago parte de una asociación que reparte alimentos a los niños de Bayunca e hice un curso de manipulación de alimentos en el SENA. Ahora mismo, como está la situación, que le den un plato de alimento es una bendición”, señaló.

Plan contra el hambre

Para el funcionamiento de las ollas y/o comedores comunitarios, se realizaron las adecuaciones necesarias para garantizar las condiciones de calidad e inocuidad de preparación de alimentos, así como se dotó con los implementos mínimos necesarios para la preparación y servido de alimentos en sitio, a través del suministro de menaje de cocina y enseres, material de aseo, saneamiento y contratación de personal profesional para apoyar el proceso.

El proyecto, que representa el inicio de la materialización del plan de lucha contra el hambre del gobierno del presidente Gustavo Petro, es liderado por el PES – Pedro Romero, en cabeza de Cielo Blanco Flórez, puesto que, desde que comenzaron las fuertes lluvias, en articulación con el sector empresarial, esta entidad atendió la emergencia instalando más de 55 ollas en los diferentes barrios de Cartagena, iniciativa que fue reconocida en todo el país.

Vale mencionar que, el Distrito de Cartagena, mediante Decreto No.1351 del 19 de septiembre de 2022, declaró la “situación de calamidad pública en Cartagena por las condiciones de riesgo para la ciudadanía a causa de la temporada de lluvias”. Luego, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, a través de Resolución No.1087 del 21 de noviembre de 2022, incluyó dentro de las ayudas humanitarias de emergencia la “asistencia alimentaria complementaria” consistente en el “suministro de, por lo menos dos raciones alimenticias diarias, cocinadas y entregadas directamente a las personas damnificadas o afectadas, a través de la instalación y puesta en funcionamiento de ollas y/o comedores comunitarios u otros”.

Con este espaldarazo, el gobierno de Salvemos Juntos a Cartagena avanza en la misión de superar la pobreza extrema, disminuyendo los índices de inseguridad alimentaria que se registran en cientos de familias cartageneras.