Cuando La Sirenita original se tomó las pantallas en 1989 no hubo ninguna duda de que este sería el gran éxito de Disney, en donde las canciones eran parte fundamental de la trama. Ahora, 34 años después de su primer lanzamiento, el live action ha llegado con un cast lleno de estrellas.
Halle Bailey, cantante y actriz, interpreta a Ariel; Jonah Hauer-King al príncipe Eric; Javier Bardem es el Rey Tritón; Melissa McCarthy es Úrsula; Daveed Diggs como Sebastian; Awkwafina como Scuttle y Jacob Tremblay como Flounder. En fin, desde Hamilton hasta No Country for Old Men, el elenco estaba lleno de sorpresas y promesas.
“Es un elenco que refleja el mundo en el que vivimos y creo que todo el mundo merece verse en la pantalla grande”, explica la comediante y actriz Awkwafina.
La Sirenita, el comienzo de Halle Bailey como una princesa de Disney
Para muchos críticos lo que más se resalta de este live action es la actuación de Halle Bailey como Ariel, especialmente por lo que le agregó a la película su talento vocal. No es por nada que Bailey ya cuenta con cinco nominaciones a los premios Grammys.
De hecho, el director de la película Rob Marshall afirmó que desde el momento que ella audicionó para el papel y cantó algunos de los clásicos nadie más le llegó a los talones. Para él, verla a ella era ver a Ariel, y así parece recibirlo el público.
“Las personas estaban verdaderamente movidas por la película. Todo el mundo estaba aplaudiendo y apoyando el trabajo duro que muchas personas han hecho en esta película”, recuerda Javier Bardem sobre la noche de estreno en Estados Unidos.
Además, agregó que no fue solo el director o el público los que encontraron en Hallie la esencia completa de La Sirenita. “Estaba encantando con la calidad de artista que es. Su voz es impecable, pero además como actriz es muy dispuesta y valiente para ir a los lugares a los que debe ir. Eso fue increíble de ver”, agrega.
Para la actriz esto no se queda corto de un sueño hecho realidad. Recuerda haber recibido la llamada del director en la que le informó que tenía el papel con un simple “¿Aló, Ariel?” y haber llorado por el resto del día de la emoción que sentía al poder traer esta historia de nuevo a la pantalla grande.
Además, la conexión que siente con el personaje es palpable en la manera en la que lo interpreta. “Ariel me ayudó a encontrarme. Especialmente con estas temáticas en la película en la que ella se ha tenido que defender, aún teniendo miedo. Esas son cosas que traté de adoptar y dármelas a mí misma”, comenta la actriz.
Desde que se comenzó a hablar del live action de este clásico de Disney se hablaron también de los cambios. Cosas tan sutiles como pequeñas diferencias en la letra de Bésala, la canción que invita al príncipe Eric a besar a Ariel para que recupere su voz, hechas con la intención de hacerla más consensuada y ajuste a la sociedad de hoy hacen que se ajuste mejor a la sociedad de hoy en día y logre una perspectiva diferente en la película.
Lo mismo pasa con Ariel, que ahora, aunque igualmente enamorada del príncipe, parece principalmente emocionada por conocer el mundo de los humanos, en lugar de entregar su voz y su cola de sirena únicamente por un hombre que rescató en el mar.
Estas pequeñas diferencias también hacen que el live action tenga más sentido y que la química que hay entre el príncipe y Ariel se sienta más genuina. “Lo que le agregamos a la relación entre ellos es la amistad. Los romances de Disney siempre están llenos de atracción instantánea y amamos ver eso, pero lo divertido de esto es ver a Ariel y Eric como dos espíritus inquietos que se sentían encerrados en sus respectivos castillos. Su relación es algo trabajado en donde ambos aprenden cosas y están fascinados por el mundo del otro”, comenta Jonah.
Además, agrega: “Creo que es un mensaje muy bueno sobre lo que significa estar enamorado y estar en una relación, que básicamente es mantener también una amistad. Eso es lo que la hace durar y la hace especial, así que fue divertido explorarlo”.
Con eso en mente, La Sirenita llega a los cines del mundo con una propuesta más real pero manteniendo por completo la esencia del clásico de Disney.