Habitantes del corregimiento de El Islote de Santa Cruz en el archipiélago de San Bernardo, comprensión del Distrito de Cartagena, lanzaron hoy su voz de alerta ante las arremetidas del Mar Caribe, cuyo fuerte oleaje afectó hoy a dos viviendas y causó inundaciones en toda esa comunidad insular.
En medio de su desespero, los nativos grabaron vídeos en donde se aprecia el embravecido Mar Caribe cuando arremete contra sus humildes viviendas, causando destrucción en dos de ellas e inundando a la mayor parte de la población.
Las imágenes muestran a numerosos habitantes de El Islote, caminando por las calles con el agua hasta las rodillas e incluso tratando de sacar el agua que penetró e inundó sus viviendas.
La directora de la Oficina de Gestión del Riesgo de Cartagena, Laura Mendoza, dijo que se ha presentado un fenómeno especial de baja presión que genera cambios en las condiciones meteomarinas provocando problemas de erosión costera, lo cual desestabilizó algunas estructuras e hizo que colapsaran dos viviendas.
Explicó que una comisión del Distrito de Cartagena conformada por la Oficina de Gestión del Riesgo, Dadis, Cuerpo de Bomberos y la Secretaría del Interior se trasladarán en las próximas horas hasta esa zona de la ciudad, que limita con el departamento de Sicre, afectado por los fuertes vientos, generados con mayor frecuencia por la actual temporada de huracanes que azota a algunas regiones del mundo.
Según la funcionaria el reporte preliminar que se ha conocido de parte de los habitantes indica que en la zona hay dos casas afectadas, varias calles inundadas, aumento del oleaje. Afortunadamente no se reportan personas heridas.
“El traslado de los organismos de socorro y personal de las dependencias del Distrito hasta el lugar se ha hecho difícil, por las condiciones que amenazan la zona. No queremos poner en riesgo la vida de nadie, ya que la única manera de llegar hasta ese lugar es vía marítima”, agregó Mendoza
Por su parte el CIOH informó que en El Islote ubicado en el Archipiélago de San Bernardo, se están viviendo los estragos de una baja presión presente en todo el litoral Caribe que ha hecho que el viento cambie de dirección, es decir, un fenómeno local y de corta duración.