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El 80 % de los casos de cáncer de ovario se detectan tarde

  • El 80 % de los diagnósticos se presenta en pacientes mayores de 50 años.[2]

  • En 2022, alrededor de 116 mujeres en la región Caribe fallecieron debido a este cáncer.5

  • Esta enfermedad aparece en una de cada setenta mujeres y su mayor reto es el diagnóstico temprano. 6

El cáncer de ovario es la segunda causa de muerte por cánceres que afectan el sistema reproductor femenino.[3] De acuerdo con el Observatorio Global de Cáncer (Globocan), en Colombia se registran aproximadamente 2.414 casos nuevos de cáncer de ovario anualmente.3 El inicio de la menstruación temprana o la menopausia tardía, la edad (entre los 55 a 65 años), factores genéticos y el no haber tenido nunca un embarazo, pueden ser factores de riesgo para que una mujer desarrolle cáncer de ovario.[4]

De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en 2022, alrededor de 116 mujeres en la región Caribe fallecieron debido a este cáncer.[5] Esta cifra resalta la importancia de fomentar aún más la prevención y la necesidad de tomar medidas proactivas para enfrentar la patología en la región entre los diferentes actores.

 Esta enfermedad aparece en una de cada setenta mujeres[6] y su mayor reto es el diagnóstico temprano. En general, las pacientes con cáncer de ovario no presentan síntomas específicos. Algunos de estos suelen ser hinchazón o distensión abdominal, dolor o sensación de presión en la pelvis, región lumbar o abdomen, indigestión, náuseas, sensación de llenura, fatiga, sangrado vaginal, pérdida de apetito o pérdida de peso, entre otros..7

Estos síntomas inespecíficos se pueden llegar a confundir con patologías menos graves como el colon irritable o una infección urinaria, lo que hace que la enfermedad avance, ocasionando que casi el 80 % de las pacientes se diagnostiquen en estadios avanzados (III y IV), lo cual a su vez influye en el incremento de los índices de mortalidad. Del 20 % restante que se diagnostica oportunamente, aproximadamente el 94 % de ellas tiene una supervivencia de cinco años después del diagnóstico.8

 “Aún existe mucho desconocimiento alrededor del cáncer de ovario y un estigma frente a sus implicaciones en la vida de las mujeres. Es fundamental incrementar la educación alrededor de esta enfermedad, así se prenderán las alertas ante los síntomas asociados de una manera oportuna, tanto en pacientes como en atención primaria y ginecología. De esta manera, las pacientes tendrán la oportunidad de tener una mejor evolución de la enfermedad y acceso a un tratamiento oportuno. Todos los involucrados debemos actuar y trabajar en conjunto para salvar más vidas de mujeres con cáncer de ovario” menciona la Dra. Adriana León, directora de la unidad de oncología de AstraZeneca.

Actualmente, no existen causas directas identificadas que hagan que aparezca el cáncer de ovario, sin embargo, las alteraciones genéticas aumentan el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Estas corresponden a las mutaciones de ciertos genes o a la inestabilidad genómica, que hacen que las células cancerígenas proliferen rápidamente y la enfermedad se desarrolle a mayor velocidad.

«Desde AstraZeneca estamos trabajando para lograr que el cáncer sea erradicado como causa de muerte a 2050. Guiados por este objetivo, trabajamos de la mano de la ciencia y la tecnología para lograrlo. Nuestros avances son muy valiosos, pero, reiteramos que el autoexamen y los chequeos periódicos son la mejor forma de prevenir o de detectar la enfermedad de forma temprana para que la vida de la persona no se ponga en riesgo”, puntualizó León.

El diagnóstico oportuno también influye en otro factor importante para tener en cuenta: la recurrencia. El 70 % de los casos de pacientes con cáncer de ovario recaen a la enfermedad,motivo por el cual, profesionales de la salud mencionan que es fundamental llevar un control cuidadoso de esta, aun cuando el paciente ya se encuentra en remisión, con el objetivo de evitar recaídas y, en caso de que esta reaparezca, poder manejarlas tempranamente.

Al tener la tasa de supervivencia más baja de todos los cánceres ginecológicos, [7] requiere de un importante trabajo de concientización, especialmente después de los 55 años. Según una investigación publicada por la revista Cáncer, las mujeres con cáncer de ovario experimentan síntomas al menos 12 veces al mes,[8] por lo que las pacientes no deben normalizar ningún signo, si no por el contrario, acudir al médico frecuentemente y realizarse los respectivos chequeos ginecológicos.