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Por: Bernardo Romero Parra
El 18 de septiembre de 2024, cuando esperaba el nacimiento de mi nieto Juan Berny Romero en la Clínica de la Mujer en Cartagena, en más de cuatro horas observe un numeroso grupo de mujeres embarazadas buscando atención médica, lo que me hizo meditar sobre la cantidad de situaciones por las que tiene que atravesar una mujer para traer al mundo un ser humano. Hecho que la hace un ser especial que los terrícolas debemos venerar y enaltecer por ser la raíz de la raza humana. Entonces le reconocí a Melida Tatis mi esposa, quien estaba a mi lado ese día, el gran mérito de ser la madre de mis tres hijos, luego pensé en Pabla Parra mi mama la mujer que me dio la oportunidad de venir a este mundo, llenándose mi mente de los recuerdos de la infancia donde la veía enseñándome las letras o cuando estaba angustiada planchando ropa de la calle mientras también cocinaba y realizaba las demás tareas del hogar.
Pabla, esa mujer de que les hablo falleció el 21 de noviembre pasado en la Clínica Cartagena del Mar, de muerte natural según dice el certificado de defunción, luego de estar hospitalizada desde el 4 de noviembre en la UCI por haber presentado una isquemia pasajera, de la cual no se le noto secuelas. Sin embargo fue internada para efectuarle exámenes médicos que no mostraron problemas graves, por lo que se decidió que le hicieran estudios más profundos. Pero después del 6 de noviembre no pudimos hablar más con ella porque nos informaron que había sufrido una crisis y se quería ir a la casa, por lo que la sedaron.
Después de varios días, los estudios médicos como Tac en la cabeza y el tórax no se los hacían debido a que el ascensor se dañó el día 6 de noviembre, pero gracias a la intervención del Director del Dadis Alex Tejada le fueron practicados el día 12 de noviembre encontrándose que le habían sobrevenidos dos isquemias que ocasionaron parálisis de la parte izquierda del cuerpo y quizás daños en el cerebro porque no volvió a hablar, ni a abrir los ojos, por lo que requería una Panangiografia cerebral que la Nueva Eps, autorizo el día 19 de noviembre para la Clínica Reina Catalina de Barranquilla, algo con que sus hijos no estuvimos de acuerdo porque esos estudios los podían hacer en IPS de Cartagena. Estando en la gestión de los exámenes recibimos la noticia de su expiración. Ante estos hechos sería bueno que el Dadis en uso de sus funciones en el sector salud realizara la investigación para verificar los protocolos de atención médicos y administrativos en la Clínica Cartagena de Mar para evitar que otros pacientes fallezcan por falencias en el servicio.