La persistente ola de inseguridad ha penetrado profundamente en la cotidianidad del municipio de Santa Catalina, dejando su huella esta vez en la venerable Casa de la Cultura. Este espacio, que acoge a más de mil jóvenes apasionados por diversas expresiones culturales como bailes, danzas contemporáneas y el aprendizaje de instrumentos, ha sido blanco de un acto vandálico que ha dejado a la comunidad consternada.
El robo ha dejado un vacío palpable, tanto en el corazón de los jóvenes entusiastas como en las arcas de la institución. Se estima que el valor de lo sustraído asciende a más de cinco millones de pesos, comprendiendo no solo el despojo de tuberías y válvulas esenciales para el funcionamiento de los sistemas de aire acondicionado, sino también la pérdida de un espacio invaluable para la formación y crecimiento cultural de la juventud local.
Este incidente no solo representa una afrenta material, sino un golpe directo al tejido cultural que ha nutrido a la comunidad de Santa Catalina. Es imperativo que se tomen medidas concretas para preservar y proteger estos espacios vitales para el desarrollo y enriquecimiento de la cultura local.
El alcalde, Manuel Polo, se pronunció y pidió a las autoridades indaguen para dar con los responsables del hecho.
