La ANI debe cumplir

Por: Bernardo Romero Parra.

El 20 de abril de 2016, el presidente Juan Manuel Santos inauguró en Cartagena el Anillo Vial de Crespo, proyecto compuesto por un túnel de 1.000 metros de longitud y un parque lineal, el cual fue concebido entre otros objetivos para mejorar la movilidad en especial de la calle 70 del barrio Crespo, pero que en el fondo generó otros beneficios colectivos al constituirse en una defensa costera de la comunidad ante los embates del mar y la disponibilidad para los habitantes de contar con un excelente espacio para la recreación y uso del tiempo libre.

Desde su puesta en funcionamiento por la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, entidad que dirigió la construcción, el parque lineal evidenció algunos errores en su diseño que han impedido el pleno uso de sus instalaciones, por ejemplo, los senderos peatonales son inconclusos cimentados en gravilla, hecho rechazado por los caminantes que prefieren invadir la ciclorruta exponiéndose a accidentes; los ciclistas no tienen forma de acceder a sus instalaciones cuando regresan de sus recorridos en el sentido La Boquilla-Crespo, no hay rampas ni dispositivo alguno que faciliten su ingreso; los árboles y demás plantas ornamentales están expuestas a la sequía a pesar de contar con puntos de agua; las zonas de expansión están inutilizadas, y por el estado de abandono de sus instalaciones hay la percepción que nadie responde por la administración del parque.

Ante la situación expuesta nos esperanzamos al conocer de la gestión ante la ANI del senador Fernando Araújo y del edil Luis González, quienes fueron a Bogotá para conseguir la restauración de este importante sitio de recreación y anunciaron la aceptación de sus propuestas. Sin embargo al coadyuvar esta solicitud ante Manuel Felipe Gutiérrez Torres, presidente de la ANI, presentándole la propuesta para el replanteo arquitectónico del diseño y uso de las zonas de este lugar de recreación y deportes, donde incluimos la petición de pavimentar en asfalto la zona peatonal; la creación de una persona jurídica para la administración y manejo del parque a través de una junta presidida por el Distrito de Cartagena, con representación del Gobierno nacional y de las organizaciones comunitarias de los sectores aledaños; y la construcción de áreas para el acceso de ciclistas, nos respondió el gerente de proyectos de la ANI, Francisco Orduz Barón, que debíamos acudir al Distrito de Cartagena. Hecho que nos lleva a plantear que la ANI debe escuchar a la comunidad para corregir los yerros del diseño y poder entregar al Distrito una obra de alta calidad como lo merecemos los cartageneros.

*P.U. Comunicación Social Periodismo.