Mural en honor al Maestro Adolfo Pacheco en San Jacinto

En una pared de una vivienda en San Jacinto, Bolívar, quedó plasmada una frase que días antes de su accidente, solicitó el Maestro Adolfo Pacheco, la colocaran allí por ser una de las que más le encantan: «A mi pueblo no lo llego a cambiar ni por un imperio».

Ese comentario se lo hizo a Lina Tapia, funcionaria de la alcaldía de San Jacinto, cuando le sugirió tomarse una foto a su lado y junto al mural que por esos días era dibujado en su honor.

Ese día el Maestro Adolfo Pacheco, lo acompañaba el periodista y escritor Alfonso Hamburguer, quien a propósito escribió lo siguiente:

Días antes del 19 de Enero, día del accidente, el Maestro Adolfo Pacheco atravesaba el parque de su propio imperio, que él mismo con canciones dibujó, rumbo a un cajero electrónico.

Caminaba lento, ayudado por un bastón, completamente reconciliado con San Jacinto y todos sus ancestros, pleno de conciencia ,sabiendo que era profeta en su propia tierra. Fue Lina Tapia, quien tiene más fotografías del Maestro que de sus propios hijos, la que lo sustrajo de la melodía que envolvía su alma.

Lina lo invitó para que se tomaran unas fotos en el mural que ordenó pintar el Instituto de Cultura y Turismo de Bolívar en una pared, pero el Maestro le dijo que la obra había quedado incompleta. Le faltaba una frase. » A mi pueblo no lo llego a cambiar ni por un imperio».

Cumplir con el deseo del Maestro es una orden que ya emitieron las autoridades culturales.

@elPolloCtg fue el grafitero cartagenero que realizó el dibujo del rostro de Adolfo Pacheco y Miguel Salcedo fue el pintor costumbrista sanjacintero que, hace poco, plasmó la célebre frase.