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En el marco del Nuevo Modelo del Servicio de Policía, orientado a las personas y a los territorios, la Policía Nacional en Cartagena, bajo el liderazgo del grupo Unidad Diálogo y Mantenimiento del Orden, en coordinación con la fundación sin ánimo de lucro «Yes We Serve», entregaron siete sillas de ruedas en una ceremonia especial en el barrio El Pozón.
Con esta macro actividad logramos mejorar las condiciones de vida y de movilidad de tres niños y niñas, y de cuatro adultos mayores, facilitando a sus familias la movilidad en sus hogares y permitiendo desplazarse con más facilidad a las citas médicas.
Con rostros de alegría de los presentes en la actividad, al recibir de manos de los policías y la fundación las sillas de ruedas, sus familiares dieron muestras de agradecimiento y cariño.
“Con esta actividad transformamos sonrisas, llegando a hogares necesitados, pudimos materializar los sueños de estas familias necesitadas y urgidas de estas sillas de ruedas”, señala el subintendente Oscar Leandro Sáez Araujo.
En esta linda actividad, se contó con la ayuda de la fundación «Yes We Serve», quienes donaron estas sillas. A través de su representante felicitaron a los beneficiados: “Hoy la fundación llega a la ciudad de Cartagena, a donar estas sillas de ruedas para mejorar la movilidad de estas personas con discapacidad”.
Gracias al arduo trabajo del Grupo Diálogo y Mantenimiento del Orden 27 de la Metropolitana de Cartagena, se pudo identificar y atender las necesidades más apremiantes de nuestra comunidad. La dedicación de este grupo, en la verificación y evaluación de cada caso, ha sido fundamental para garantizar que esta ayuda llegue a quienes más la necesitan.
“Vivimos en el barrio Olaya Herrera y estamos muy agradecidos con la Policía Nacional y la Fundación por esta ayuda que nos han brindado, por la donación de esta silla de ruedas a mi madre que tiene 87 años edad y sufre de osteoporosis”, comenta María Morales.
Estos beneficiarios, de los barrios Pozón, Olaya Herrera, San Fernando, La Paz, 20 de Julio, La Consolota y el municipio de Soledad, son el testimonio tangible de nuestro esfuerzo por construir una sociedad más inclusiva y solidaria. Cada silla de ruedas entregada representa una vida transformada, una oportunidad para recuperar la movilidad y la independencia, y un rayo de esperanza para aquellos que enfrentan desafíos físicos.