Por: Bernardo Romero Parra
El caos ocasionado en la movilidad por los bloqueos de los mototaxistas el pasado lunes en Cartagena, develó la vulnerabilidad de la ciudad ante factores de perturbación al orden público a pesar de la voluntad del alcalde de ejercer su autoridad para evitar la parálisis y los desmanes de quienes actuando como antisociales obstruyeron vías, destruyeron bienes públicos y pusieron en riesgo la vida e integridad física de pasajeros de Transcaribe.
Siendo demócratas apoyamos la movilización social para manifestar el rechazo a medidas del gobierno, pero lo que no podemos aceptar, ni respaldar es que se use una acción reivindicatoria, cometiendo abusos y desconociendo los derechos colectivos del resto de la ciudadanía.
El transporte informal en motos es una problemática de grandes magnitudes que en su envergadura merece idéntica atención por parte de las autoridades y fuerzas vivas de Cartagena, para la concertación de soluciones paliativas urgentes, pero de fondo a mediano y largo plazo, las cuales se deben identificar y formular con el liderazgo de la Alcaldía, pero con la participación del gobierno departamental y nacional; los gremios económicos, centrales obreras y demás organizaciones sociales como las Juntas Acción Comunal, junto a los conductores de motos. Para lo cual es menester que el alcalde acoja la propuesta de instalar una mesa de diálogo social, conformada por representantes de los sectores mencionados para que escuchen, analicen, formulen en un tiempo determinado un plan integral de atención al transporte informal que tenga como prioridad al mototaxismo.
Conseguir la cofinanciación de recursos con entidades del orden nacional e internacional para la ejecución del proyecto de cambio de actividad económica que promueva la inserción laboral, previa capacitación o el emprendimiento comercial de los conductores beneficiarios, debe ser una tarea a realizar, junto a la creación de un fondo de recursos que se puede nutrir inicialmente con las asignaciones presupuestales que hoy tiene el Distrito en el Plan de Emergencia Social, PES, la Unidad de Proyectos Productivos de la Secretaria de Participación y Desarrollo Social y en la Secretaria de Hacienda.
Los caracterizados como mototaxistas deben firmar un compromiso para iniciar un proceso de capacitación con el SENA o entidad afín, que promueva en ellos el desaprender el irrespeto a las normas y señales de tránsito para aprender mejores y nuevos comportamientos de convivencia social frente a la movilidad urbana, so pena de que si reinciden en infracciones, sean excluidos del proyecto.