Una ojeada al Plan de Desarrollo de Cartagena

Por: Danilo Contreras

Suelo hacer la lectura de los borradores de los planes de desarrollo y realizar observaciones ciudadanas que desde luego corresponden a la visión del progreso que he elaborado a través del tiempo y las experiencias acerca de la ciudad y la
región. Cometo tal audacia para el caso del plan que actualmente se tramita considerando la capacidad de “gobernar escuchando” que profesa el alcalde.

A pesar de que son varias las inquietudes, no he podido evitar centrar estas primeras consideraciones en el séptimo “componente impulsor” de la línea de “Desarrollo económico equitativo y sostenible”, denominado “Sistema Integral de
Abastecimiento Alimentario del Distrito”, como parte de una “nueva agenda urbana”, considerando que en algún periodo me correspondió hacer algunos planteamientos al respecto. Resumo y enumero así:

1. No hay duda; la idea de un “clúster de la cadena agro alimentaria” se constituye en genuino “impulsor” del desarrollo económico y social sostenible de la región, en un contexto mundial en el que se sabe que para 2050 seremos unos nueve mil millones de habitantes en el planeta y será necesario producir un 60% más. Países como Colombia son considerados
potenciales despensas de alimentos del mundo y Cartagena tiene todas las ventajas competitivas agro logísticas para posicionarse como líder en esa visión innovadora.

2. Luego de la sentencia de 9 de febrero de 2010 del Tribunal Administrativo de Bolívar que ordenó que “En el marco del Plan de Renovación Urbana del Mercado de Bazurto, se realicen los estudios necesarios para efectuar el traslado del mismo…”, se planteó como prioridad la constitución de un “Sistema Integrado de Abastecimiento Alimentario”, que permitiera dar
cumplimiento al fallo, adaptándolo a la visión que sobre el ordenamiento del territorio se encuentra planteado en el artículo 17, numeral 4 del POT vigente que señala: “Sistema de Mercados. Con el fin de descentralizar la actividad de abastecimiento de alimentos de la población urbana, se definirán mercados para cada una de las 4 zonas, complementadas con mercados
móviles”.

3. Así, al inicio de la década pasada se intentó una conceptualización del “Sistema Integrado de Abastecimiento Alimentario” que trascendiera la idea de un “Sistema de Mercados”: “Se diseñará e implementará un Sistema de Seguridad y Abastecimiento Alimentario con perspectiva Regional entendido como un conjunto de instituciones, normas, soportes e infraestructuras logísticas, encargado de administrar y coordinar los procesos de movilización, transformación y comercialización de los productos destinados a satisfacer las necesidades alimentarias de los ciudadanos de Cartagena de Indias, en condiciones de calidad, alto valor nutricional, acceso oportuno y permanente, reduciendo intermediación, con precios justos y fortaleciendo los circuitos económicos urbanos y rurales”.

4. En su momento y aún hoy, adelantándome quizás a las tesis que ha remozado Mariana Mazzucato en su libro “El Estado Emprendedor”, defendí que la implementación del sistema debería tener una fuerte participación del Estado, de empresarios privados y gran protagonismo de actores de la economía popular a quienes en su momento defendí en Bazurto y en calles y
espacios públicos de la ciudad. Fue así como se propuso la creación de una Sociedad de Economía Mixta para jalonar el proyecto, iniciativa que luego fue desvirtuada por el alcalde Dionisio Vélez que redujo los propósitos a la construcción de un nuevo mercado en la zona de La Cordialidad, frente a la entrada de El Pozón, en el que refundiría, nuevamente, a comerciantes mayoristas y minoristas en un negocio que solo valoraba la especulación inmobiliaria dejando de lado otros aspectos para la estructuración de un verdadero “Clúster Agro logístico”.

5. Considero que el Plan reduce las miras del planteamiento referido al definir que el sistema “asume como meta fundamental la transformación del sistema de mercados de la ciudad en centros de comercio sostenible…” y confunde la
idea de un “Sistema Integral de Abastecimiento Alimentario del Distrito” con un “sistema de mercados”, que parece restringirse también a un negocio de carácter inmobiliario.

6. Esa discordancia se nota en las metas propuestas para el cuatrienio; por ejemplo, se plantea el “Incremento del 15% en el Índice de Desarrollo Integral y Sostenibilidad del Sistema de Mercados…”, pese a que tal “Sistema” no existe, ni como “Sistema de mercados”, ni como “Sistema de Abastecimiento integrado” que es la idea que hemos defendido. Al tiempo, planteamientos como la “Creación de una red de bancos de alimentos de Cartagena, promoviendo el aumento de los mismos y generando oportunidades para optimizar su funcionamiento e impacto en las diferentes localidades del
Distrito”, carecen de metas para el cuatrienio y sorpresivamente la responsabilidad se pone en cabeza de la Secretaria General cuyas competencias son aparentemente incompatibles con los programas debatidos aquí, mientras otras responsabilidades se asignan a la Secretaria de Participación con lo cual se resta capacidad de gerencia institucional a
cualquier proyecto.

7. Lo grave de esa confusión es que por la lectura de este lineamiento del Plan no se sabe si el Distrito construirá un nuevo mercado que refundirá en una competencia desigual a comerciantes mayoristas y minoristas, o si por el contrario se maneja la idea del abastecimiento descentralizado que es un criterio que viene esbozado desde la época, remota ya, del traslado del
mercado de Getsemaní hacia Bazurto.

8. De otro lado la visión regional del proyecto que permitiría una Central de Abastecimiento mayorista en el área metropolitana y mercados sectoriales en las centralidades que conforman la ciudad, como escenarios para el desarrollo de economías populares y gran atractivo turístico, integrada a una perspectiva de producción, transporte, transformación y exportación de la oferta agroalimentaria del departamento de Bolívar y el Caribe, se pierde.

9. Conforme mi prescindible criterio, el “componente impulsor” de la línea estratégica de “Desarrollo económico equitativo y sostenible”, denominado “Sistema Integral de Abastecimiento Alimentario del Distrito”, así planteado, carece de impacto real pese a que existe una gran oportunidad para solucionar múltiples problemas del ordenamiento territorial y de orden
económico y social.