El excesivo ruido que generan taxis y carros particulares con pitos, resonadores y potentes equipos de sonidos, al igual que los grupos musicales callejeros, discotecas con las puertas abiertas, más la romería de rumberos que gritan y arman disputas en las calles del Centro Histórico de Cartagena son un grave problema de todas las noches para los residentes y turistas que vienen a la ciudad en un plan distinto a la rumba.
Ante esta problemática el Colectivo Somos Centro Histórico solicitó a las autoridades locales y la dirección del Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte, DATT, que peatonalice las calles del Centro Histórico en las medias noches hasta la madrugada para reducir en parte el ruido perturbador que generan los automotores.
Igualmente, solicitan control a los otros agentes que producen ruido con nuevos horarios para la rumba que en la actualidad se extiende hasta después de las 2:00 de la madrugada. Situación que afecta la tranquilidad y el descanso nocturno de los residentes y huéspedes de hoteles.
Aclara el Colectivo, que de acoger las autoridades la peatonalización de las calles del centro histórico en las medias noches, no podría ser “carta blanca” para la invasión del espacio público por el comercio nocturno formal y no formal que ocuparía con mesas y sillas calles y plazas, igual, esas actividades también generan ruido.
Complementa la propuesta del Colectivo, que las estaciones de taxis para los rumberos deben estar fuera del cordón amurallado y así se controla la excesiva pitadera, el congestionamiento de carros en las calles del Centro Histórico donde funcionan discotecas, que prácticamente son intransitable en las medias noches y parte de la madrugada.
El ruido que producen las actividades del turismo de excesos nocturno violan las normas establecidas en el Plan de Ordenamiento Territorial, entre otras disposiciones, como el Código de Policía y Convivencia Ciudadana.
Enfatiza el Colectivo Somos Centro Histórico que se ha solicitado al DATT que tome el control de la situación, pero no ha habido respuesta a peticiones que buscan darle tranquilidad a los residentes y turistas.