Por: Luis Miguel De Ávila Rodríguez
Los habitantes del corregimiento de Barranca Vieja, jurisdicción del municipio de Calamar, Bolívar, no pueden dormir, preocupados por una inminente inundación del río Magdalena que cada día aumenta su caudal.
En Barranca Vieja se duerme con un ojo abierto y otro cerrado, comenta Santander De la Cruz.
» En el sector conocido como Bajo del Peñón, donde el gobierno departamental ejecutó una millonaria inversión, cada día se lo traga el río y vamos a vivir una tragedia «, pronostica De la Cruz.
El alcalde de Calamar, Alejandro Mario Arrazola Sagbini, está enterado de la situación, pero no tiene voluntad política de prevenir un desastre, recalcan los dirigentes cívicos.
Denunciaron que una motobomba que instaló la Gobernación de Bolívar para extraer las aguas del sector al igual que un panel solar se los robaron, se denunció el hecho y no hubo pronunciamiento de la alcaldía.