Por: Luis Miguel De Ávila Rodríguez
En la década del 70, el gobierno de la ciudad de Cali, adelantó una campaña de construir buen ciudadano.
Impulsó la cultura del respeto a las normas y logró que los usuarios de buses aguardarán su puesto mediante filas para abordar los vehículos.
En Cartagena se copiaron el proyecto e instalaron unas rejas para el control de la subida a los buses en los paraderos del centro. Fracaso total.
Bernardo Romero, quien andaba afiebra’o de civismo, logró que sus vecinos de Daniel Lemaitre, abordarán los buses haciendo cola. Esa pedagogía la impuso entre los usuarios de taxis colectivos.
Gustó, la respetan y sigue vigente. Truene, llueva y a pleno sol con paciencia esperan su turno. PACIENCIA RESPETO Y EJEMPLO DE BUEN CIUDADANO.