Durante veinte años el silencio se apoderó de los Montes de María. El temor certero vivió en esta zona y los ruidos de las balas, las bombas se recrudecieron. Los campesinos huían de sus tierras con lo que tenían puesto y una que otra gallina que pudieran llevar al hombro, hasta llegar a la ciudad más cercana. La tierra prospera y fértil conocida como la despensa agrícola de Colombia se quedó desierta.
Los grupos al margen de la ley dominaban a su antojo esta subregión que la componen 15 municipios del departamento de Sucre y Bolívar. Fueron veinte años eternos manchados de dolor, amargura y desesperanza.
Esta subregión es refugio del bosque seco tropical, que alberga gran diversidad de flora y fauna. Abundan los cultivos de tabaco, ñame, ajonjolí, maíz, plátano, yuca, cacao y aguacate. También habitan arboles milenarios y de exótico follaje como el cañaguate, el macondo, el caracolí y la ceiba.
Es precisamente, debido a su riqueza natural que los Montes de María han sido un territorio históricamente en disputa y controlado por diferentes grupos armados, al ser un paso estratégico hacia el interior del país por Antioquia y al exterior con el mar caribe posibilitando así el despliegue de acciones armadas y la movilización de drogas, armas e insumos químicos.
En el año 2012 los campesinos retornan al campo. Ello implicaría volver a construir el hogar, recuperar sus tierras, ver que amigos se encontraban vivos y como renacían después de la tragedia.
El ñame de la paz
El ñame de la paz, como lo han denominado los campesinos que producen este tubérculo, hace parte de un proyecto de intervención territorial PDET que se ejecuta en el municipio de El Carmen de Bolívar en el que se busca fortalecer la cadena productiva, mejorar la comercialización del producto, cuidado de semillas y fortalecimiento organizacional. A su vez le apunta reactivar la economía de este municipio en su zona rural que fue azotado por el conflicto armado.
Con el silencio de las armas y los enemigos fuera del territorio 100 familias víctimas que siembran sus esperanzas en el campo se benefician directamente proyecto del ñame diamante que tuvo una inversión de $1.706 millones.
El “Ñame de la Paz” ha permitido que nosotras no seamos solamente amas de casa, así lo afirma María Alejandra Vecinos, socia del proyecto de ñame diamante “Nos pareció genial el proyecto y poder incursionar nosotras como mujeres. Además, se nos capacito con el tratamiento de la semilla y tenemos la posibilidad de generar empleo.” En el centro de acopio de ñame de Macayepo trabajan 12 mujeres que se encargan de la limpieza del producto, encajetamiento y empaque. Que son los empleos directos que se generan en esta bodega.
“Para nosotras la llegada del PDET a esta zona ha sido como la luz al final del túnel, que muchas veces no la ves cerca, pero sabes que está allí” señaló Vecino.
Las 100 familias que se benefician crearon una asociación que se llama Asoprocoñam que nace en el marco de proyecto que hace parte de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial- PDET. Los miembros de esta asociación se encuentran en cuatro corregimientos como lo son: Macayepo, Caracolí, Guamanga y San Isidro que hacen parte de El Carmen de Bolívar.
Existen tres puntos de acopio para el producto del ñame en que los campesinos llevan su cosecha y se le paga de manera inmediata. El principal punto de recepción del ñame se encuentra en Macayepo, el segundo en Caracolí y Guamanga que se unieron, por último, el de San Isidro. Un bulto de ñame en las bodegas de la asociación tiene un valor de 33.000 pesos.
El ñame diamante lleva 24 años en los Montes de María. “Estamos agradecidos, pues hoy tenemos una asociación que mejoró la producción del tubérculo y le estamos apostando a la reactivación económica no solo del municipio sino de la región “Cesar Rafael Anillo, presidente de la Asoprocoñam. Recibieron capacitaciones sobre las buenas practicas y las curaciones de las semillas para tener unos buenos productos orgánicos. “Ya somos técnicos aparte de que somos agricultores “afirma Anillo
De los Montes de María para el mundo
En total el proyecto les dio 6.600 semillas de ñame a cada campesino para que realizara la siembra en una hectárea. “Nosotros logramos sembrar 10 mil semillas que tiene un equivalente a 12 toneladas de ñame diamante” Wilger Gonzalez Serpa, Miembro de la Junta directa de la Asociación.
La siembra se realizó en los corregimientos de Macayepo, Caracolí, Guamanga y San Isidro. La plantación y recolección es liderada por Asoprocoñam y en las que se ha logrado mover más de 12 contenedores del tubérculo que están siendo comercializadas en Estados Unidos, España, Puerto Rico y Ecuador que se envían cada 15 días y se espera muy pronto ser comercializado en los mercados nacionales en grandes almacenes de cadena.
“Aprendimos que no podíamos seguir sembrando de a metro, puesto que el ñame se crece mucho y ese no sirve para exportar. El ñame que nosotros enviamos tiene unas medidas y un peso con el que se garantiza la calidad del producto, desde el momento de la siembra “Pedro Pablo Murillo, miembro de la asociación.