Son más de 400 estudiantes que se encuentran sin dar clases; toda vez, que los representantes de la comunidad en cabeza de la Junta de Acción Comunal y el Consejo Comunitario de Tierra Baja decidieron impedir el ingreso de una operaria contratada por la empresa Mayordomía, para prestar el servicio de aseo a la Institución Educativa, ya que no pertenece a esa comunidad.
Por ello, a partir de hoy, se suspendieron las clases en la Institución Educativa de Tierra Baja y esta situación se hace de carácter indefinido hasta que la Secretaria de Educación del Distrito y la empresa contratada para el suministro del personal de aseo a la escuela, tenga en cuenta a personas de la misma comunidad.
Yasmina Carmona Gómez, representante legal del Consejo Comunitario de Tierra Baja, dio a conocer que hace dos meses unos nativos prestaron gratuitamente el servicio de vigilancia y al llegar la nueva empresa, no los contrataron, quedaron por fuera y trabajan otros vigilantes que no son de la comunidad. Hoy muy a pesar que tienen hojas de vida de nativas, la empresa Mayordomía, envía a una mujer para el aseo del colegio que no es de aquí. “Lo que nosotros solicitamos es que se contraten a personas de la población”.
Por su parte, Sandra Núñez Suarez, delegada de la Junta de Acción Comunal de Tierra Baja, manifestó que en esa población hay muchas mujeres, madres cabezas de hogar, desempleadas que reúnen los requisitos para desempeñar ese trabajo y no fueron escogidas. “Otra cosa, es que solo van a contratar a dos personas, una de tiempo completo, otra de medio tiempo, cuando antes desarrollaban ese trabajo 4 personas, ya que existe una sede principal y una subsede donde funciona el preescolar”.
“En estos momentos hay 406 niños en la institución principal, están suspendidas las clases y está parado el servicio de aseo, hasta que la Secretaria de Educación y la empresa Mayordomía solucionen”, destacó Ruth Cerro Tatis, rectora de la institución quien respeta la decisión que tomó la comunidad.