Bogotá, septiembre de 2021. “Colombia reúne todas las condiciones para consolidarse como un país muy atractivo para la inversión extranjera. Los principales indicadores de la economía son positivos y las expectativas de crecimiento son favorables, razón por la cual hay lugar para el optimismo”.
Así lo plantea Diego Gaitán, gerente general de Desarrolladora de Zonas Francas del Grupo ZFB, quien además sostiene que Colombia se está despertando en el tema del e-commerce, sector en el que hay mucho espacio para crecer.
El ejecutivo propone unir esfuerzos para acelerar el ritmo de reactivación logrado en los últimos meses, y afirma que la nueva dinámica empresarial es una señal clara del optimismo de las compañías que operan en el país.
¿Cuál ha sido el impacto de la pandemia en el Grupo ZFB?
Es importante separar el análisis en partes, es decir, tanto en lo sucedido el año pasado, como en lo corrido del 2021, y revisar lo que pasó en el sector de la industria y la logística, al igual que en los servicios.
En 2020 contamos con la suerte de que la industria y la logística no pararon porque estaban dentro de las exenciones establecidas por el Gobierno. Eso permitió seguir produciendo, recibiendo y despachando mercancías y materias primas. Sin embargo, hubo unas pocas industrias muy golpeadas, que tuvieron que paralizar su producción, como el ‘catering’ para atender a las aerolíneas.
En el tema de servicios sí hubo una pérdida en los indicadores de ocupación en las zonas francas. Los más afectados fueron los contact center que, aunque no pararon enviaron a su personal a trabajar desde sus casas y dejando desocupadas las oficinas. Hoy están en una ocupación de entre 30% y 50%.
Aun así, a pesar de que el 2020 fue un año crítico para la economía, el Grupo Zona Franca de Bogotá logró pasar el año con números favorables, lo que es una victoria para la organización.
¿Qué ha pasado en el 2021?
Este año la industria empezó una recuperación rápida entre enero y marzo, hasta llegar incluso al 80% o 90% de la operación del 2019. Sin embargo, el paro nacional le puso un freno impresionante a las empresas, lo que generó una nueva caída en la operación, ubicándonos de nuevo en el 30% o 40%. La industria paralizó la movilización de mercancías terminadas y de materias primas, en tanto que muchas personas no pudieron llegar a sus lugares de trabajo.
Lo más grave fue que esta situación frenó los proyectos de inversión que estaban en marcha. Muchas empresas levantaron el acelerador en sus planes de expansión, ubicación o relocalización en Colombia.
¿Qué sectores son los más interesados en ubicarse en las zonas francas colombianas?
Los de logística de importación y exportación, y las empresas exportadoras de flores, farmacéuticas y la industria automotriz (repuestos y partes).
¿Cuáles son los proyectos nuevos de la Desarrolladora?
El principal proyecto es nuestro Complejo de Datacenters Zetta, un ambicioso proyecto de la región que contará con 4.560 metros cuadrados de área blanca, que en su totalidad demandará inversiones por 90 millones de dólares y del cual hoy ya contamos con la primera fase construida con un área total de 1.140 m2.
Tenemos otro proyecto en marcha en el municipio de Clemencia (Bolívar). Se trata de un parque industrial y zona franca de 268 hectáreas, para empresas que requieren grandes espacios para montar sus plantas.
También estamos trabajando en el proyecto Zona Franca de Bogotá 2, que incluye parque industrial, y avanzamos en una iniciativa con los municipios para potencializar sus zonas francas, apoyadas en el decreto 780, que las cataloga como 4.0. Este instrumento permite atraer inversión con una menor tarifa de renta (20%), que se suma al ingreso de equipos y materias primas sin arancel ni IVA.
¿Cómo va la llegada de empresas extranjeras que se quieren reubicar en Colombia?
En este momento estamos trabajando fuertemente con ProColombia y las agencias de promoción de inversión, que nos ha permitido identificar empresas en China, Asia, Europa, México y Perú.
Esto les ayuda a hacerle el quite a la guerra de aranceles desatada en todo el mundo, y a reducir costos de logística para vender en Estados Unidos, país con el que Colombia tiene un Tratado de Libre Comercio muy atractivo.
Alineados con esta tendencia de nearshoring, hemos estado liderando un proyecto de analítica de datos de la mano con Procolombia y algunas agencias de promoción de inversión para identificar aquellas empresas extranjeras que tendrían mayor interés en ubicarse en nuestro país.