Natalia Cabarcas, hija de tigre….

Natalia Cabarcas Marimón, tiene 15 años de edad, cursa Décimo grado en el Colegio Mixto de La Popa, y heredó de su papá Javier Cabarcas; un líder ambientalista de Cartagena, esa vocación y voluntad de servicios y de entregarse a las comunidades para adelantar campañas que favorezcan a los más necesitados.

Tiene un poder de convencimiento y una habilidad de expresión que le permite fácilmente despertar simpatías en quienes la empiezan a conocer y tal vez esa condición es la que hace que su candidatura al Consejo de Juventudes por la Localidad 1 gane a diario muchos simpatizantes.

En dialogo con Mundo Noticias dijo que heredó de su padre esa vocación de servicios, tras acompañarlo en los últimos tres años entregando ayudas y gestionando ante personas e instituciones públicas y privadas la entrega de alimentos, sillas de ruedas y elementos para mejorar sus condiciones de vida.

Le fascina hablar de medio ambiente, economía, política, filosofía, lengua castellana y es una buena amante de la lectura. Precisamente una de sus propuestas es incentivar la lectura como mecanismo hacia la formación del ser y se acaba de ganar el concurso Intercolegial de Cuento Cuarta Categoría del Centro de Enseñanza Precoz Nuevo Mundo con el cuento titulado «Calor a casa».

Dice que le nació un sentimiento de servir a los demás y «Dios me dio la facilidad de entregarme a la gente y por eso estoy en esta actividad llevándoles un mensaje a los jóvenes y a las comunidades, quiero despertar conciencia ciudadana».

Hay que darle a la juventud herramientas para mejorar sus condiciones de vida, que existen más alternativas que actos violentos, asegura esta joven aspirante al Consejo de Juventudes de Cartagena.

Diariamente realiza visitas casa a casa en los barrios de su Localidad, junto a su padre, adelanta campañas en favor y cuidado del medio ambiente en los cuerpos de agua, especialmente en el Caño Juan Angola y la Laguna de El Cabrero.

Afirma que para nadie es un secreto que hay muchos jóvenes en riesgo, en donde se evidencia que su calidad de vida no es la mejor, ellos también hacen parte de las comunidades, hay que brindarles una mano aliada, en donde no se vea la exclusión, en cambio si la inclusión tanto para ellos como para los discapacitados, en donde se pueda velar su bienestar, inculcar a los buenos hábitos como lo son la lectura, el deporte y buen uso de las redes sociales, todas estas nos pueden brindar nuevas oportunidades.

Dijo que hay que formar jóvenes emprendedores y concientizar del cuidado del medio ambiente, sabiendo que la Localidad 1 cuanta con muchos cuerpos de agua y zonas verdes.

Cada día son más los jóvenes que están por fuera de los programas educativos, de salud, de preparación e intermediación para el trabajo, de acceso al mundo de la cultura, la ciencia y la tecnología, a las posibilidades de la expresión artística, a la recreación y uso creativo del tiempo libre.

Puntualizó que debemos formar para la participación, implica sensibilizar para querer participar, aprender para saber actuar, en donde despertamos la conciencia de que existen posibilidades de acción.