Bolívar. la cadena de comercialización ilegal de huevos de iguana tiene muchos eslabones que terminan constituyendo negocios muy lucrativos en lo económico y que, en temporada reproductiva (los meses de febrero y marzo), pueden mover grandes cantidades de dinero.
En las últimas horas miembros de la Seccional de Tránsito y Transporte del Departamento de Policía Bolívar, mediante acciones de vigilancia y control adelantada en la vía que conduce del bongo a bodega, ruta 7802, kilómetro 42, corregimiento de Juan Arias del municipio de Magangué, fueron capturados dos individuos de nombres, Elimeleth Guzmán Richa de 45 años, natural de Magangué y Amauri Padilla Ramos, de 63 años de edad, de la ciudad de Cartagena, por transportar más de 5 mil huevos de iguana.
La detención se dio, luego de que los uniformados solicitaran un registro a un vehículo tipo microbús de placas SZL-859, de servicio público y encontraran en la bodega una caja, las cuales tenían 23 bolsas transparentes donde iban metidos los huevos de esa especie.
Tras el hallazgo, los policiales requirieron a los dueños de la mercancía, y procedieron a capturarlos por el delito de aprovechamiento de los recursos naturales renovables.
Los procesados fueron puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación para su judicialización.
Al respecto, el Coronel, Tahir Rivera Suescún, comandante del Departamento de Policía Bolívar, aseveró, “explicó que debido a la forma rudimentaria, artesanal y cruel como son extraídos los huevos de iguana, muchas hembras quedan estériles, pero también son muy pocas las que sobreviven al procedimiento, cada iguana puede producir alrededor de 30 huevos, y los cazadores que las atrapan en su medio natural, lo que hacen es realizarle una herida en el estómago, para extraer los huevos, a veces las cosen o en ocasiones la dejan con la herida abierta. Sin embargo, de las iguanas que se atrapan y son sometidas a este tipo de procedimientos, sólo el 10% se alcanzan a recuperar, las demás mueren y las que viven, quedan estériles para toda su vida”. Aseveró.
El oficial agregó, que el artículo 328 del código penal colombiano, que hace referencia al delito ilícito aprovechamiento de los recursos naturales renovables, el que con incumplimiento de la normatividad existente se apropie, introduzca, explote, transporte, mantenga, trafique, comercie, explore, aproveche o se beneficie de los especímenes, productos o partes de los recursos fáunicos, forestales, florísticos,
hidrobiológicos, biológicos o genéticas de la biodiversidad colombiana, incurrirá en prisión de cuarenta y ocho (48) a ciento ocho (108) meses y multe hasta de treinta y cinco mil (35.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes.
La pena se aumentará de una tercera parte a la mitad, cuando las especies estén categorizadas como amenazadas, en riesgo de extinción o de carácter migratorio, raras o endémicas del territorio colombiano.
Finalmente, el comando del Departamento de Policía Bolívar, invitó a la comunidad a tomar conciencia de la importancia de proteger nuestra fauna silvestre, denunciando de manera oportuna la venta ilegal de estas especies, puesto que, constituyen un daño ecológico irreparable al ecosistema.